Hablar de Manu García, es hablar sin lugar a dudas de uno de los pioneros de las MMA españolas. Fue de los primeros -por no decir el primero, que comenzó a viajar a Brasil, a aprender de los mismísimos Gracie, a organizar veladas y a convertirse en el primer campeón, de lo que por aquel entonces era llamado “Vale-tudo”.
Y por supuesto, también de los primeros que comenzó a realizar Seminarios por toda la geografía nacional, y a enfrentarse con todo aquel que quisiera probar la efectividad de su arte marcial en una época en la que no había límites de peso ni de tiempo, y las únicas reglas eran no morder y no meter los dedos en los ojos.
Yo le conocí en aquella época, en uno de aquellos seminarios que impartió en Madrid, y como a otros tantos, me “abrió los ojos a la realidad”. Hoy, 18 años despúes y con más de 40 años, volvió a hacer historia ganando un combate en Bellator, una de las más importantes compañías de MMA a nivel mundial.
DM: Posiblemente algunos de nuestros lectores más jóvenes no te conocerán, pero eres ya toda una leyenda y parte de la historia de las MMA de nuestro país. Háblanos un poco de tu trayectoria (hasta antes de las MMA).
MG: Pues mis comienzos fueron casi cuando tuve uso de razón, con 5 años de edad comencé hacer Judo, a los 8 ya estaba compitiendo en Judo, con 12 empecé a compaginar el Judo con el Karate hasta q me saqué el cinturón negro con 16 años y con esa edad ya impartía clases de Karate en un colegio de niños más jóvenes que yo.
A los 18 años comencé a sentir una gran voluntad de empezar a entrenar con Dan Inosanto, el alumno de Bruce Lee, en aquella época venía a España a impartir algún seminario pero no tuve suerte ese año, pero si venía su instructor de muay thai así que decidí probar eso del muay thai y me encantó, venía de hacer también Full Contact y el Muay Thai me parecía devastador. Decidí formarme en ese estilo y la vez comencé a impartir clases de una forma más sería hasta tal punto que se convirtió en mi forma de vida, llegados a ese punto necesitaba de una buena formación y aquí en España como siempre ha sido desde el comienzo de los tiempos sólo veía peleas y politiqueos en todos los sistemas así como luchas de poder.
Decidí ir a formarme a los EEUU, con 22 años y sin saber hablar nada de inglés me fui a California a formarme con varios instructores en diversos sistemas, de hecho buscaba al mejor del mundo en cada sistema. A mi vuelta a España decidí aprender también inglés y trabajaba durante todo el invierno impartiendo clases y de seguridad para luego poder pasar todo el verano en los EEUU formándome.
DM: ¿Cómo conociste las MMA, por aquél entonces “Vale-tudo” y qué te atrajo de ellas?
MG: Pues fue allí que ya empezaban a televisar en pay per view el UFC y en la Academia de Dan Inosanto me llamaba la atención que en las bolsas de los instructores todos tenían los vídeos instruccionales de los Gracie, así q decidí inscribirme en su Academia en Torrance y compaginar ambas academias una en la mañana y otra en las tardes, pero me impresionó tanto el Gracie Jiujitsu que al año siguiente decidí dejar la Academia de Inosanto y centrarme al 100% en ese sistema. En aquella época en España yo era miembro del equipo Nacional de Muay Thai así que a mi vuelta le pregunté al presidente de la Federación si habría la posibilidad de organizar un torneo como el UFC aquí y si me daría la cobertura legal. Me dijo que sí y así fue como organicé en mayo del 95 el primer torneo de Vale-tudo en Europa y España y me convertí en el primer campeón de Vale-tudo.
DM: ¿Con quién te formaste y dónde?
MG: Mis comienzos fueron con Royce y Rorion Gracie. Principalmente con Royce, durante 5 años, después me fui a Brasil y estuve con Marco Ruas y su equipo durante 3 años.
DM: ¿Cómo fue tu primer combate?
MG: Mi primer combate fue con Carlos Molto. Era campeón de España de Thai Boxing, pesaba 95 kg y yo apenas 70 kg. Lo vencí en 45 segundos con una palanca de brazo. Como era de Muay Thai no sabía palmear y yo apreté más, pensé que no le estaba haciendo daño, le partí el brazo. En aquella época el árbitro no podía parar la lucha, sólo los luchadores podían rendirse y abandonar. No había pesos, ni tiempo, y excepto morder, meter dedos en los ojos y golpear los genitales todo estaba permitido. Podías dar cabezazos, tirar del pelo, agarrarte a las cuerdas del ring… eran otros tiempos. Ahora estudiamos a nuestro oponente por sus luchas en YouTube, en aquel tiempo era un problema hasta saber si tu oponente sería diestro o zurdo. Yo usaba un método propio: me iba a verlo comer y ver con que mano usaba los cubiertos. Así eran aquellos tiempos.
DM: Por aquél entonces ¿Imaginaste que las MMA iban a llegar hasta donde han llegado hoy día?
MG: No, nunca lo hubiera imaginado. Pero tampoco era algo en lo que se pensará, en aquella época se luchaba para saber quién era el mejor y que estilo era el mejor. Importaba más el luchador que el nombre del evento. Hoy en día es más importante la canción que el cantante, más importante para que empresa luchas que el luchador que eres.
DM: ¿Cuál ha sido el combate más difícil de tu vida?
MG: Yo creo recordar que fue con el brasileño Tony Malhado, cinturón negro de Carlson Gracie.
Tuve que patear mucho sus piernas y él era muy duro. Sus piernas quedaron amoratadas pero mis tibias quedaron molidas. Aún tengo cicatrices en ellas de aquella lucha; mis tibias estuvieron hinchadas por varias semanas. Esa es la que recuerdo como más dura.
DM: ¿Y cómo resultó la pelea?
MG: Fui vencedor y el primer español que conseguía vencer a un brasileño cinturón negro de Jiujitsu que en aquel tiempo era toda una proeza.
DM: Y en lo personal, ¿cuál ha sido tu pelea más difícil?
MG: Mis problemas de salud sin duda alguna. Con 30 años ser diagnosticado de fibromialgia y vivir con esos dolores toda mi vida, aún a día de hoy tengo que tomar morfina cada 12 horas. Después me diagnosticaron artrosis en ambas caderas y me dijeron que me iba a quedar en una silla de ruedas. Conseguí operarme con un excelente cirujano y volví a luchar y vencer en un evento de primera división como es Bellator, después de decirme q nunca más podría caminar fue una gran victoria personal, pero el día a día es muy duro.
DM: Volviste a pelear tras un tiempo de retiro en Bellator, y pensabas haber hecho tu pelea de retiro el 16 de marzo también en esta compañía ¿Qué paso?
MG: Oficialmente yo ya estoy retirado desde mi lucha en Bellator, de hecho no he vuelto a luchar más desde aquella lucha.
He tenido algunas ofertas pero siempre se han torcido a última hora.
DM: ¿Hay planeada una última pelea tras este incidente o ya has decidido colgar los guantes?
MG: Realmente no siento ganas ya de luchar, sólo una buena oferta económica o volver a luchar en Bellator me harían volver, siempre q mi salud me lo permita. Ambas posibilidades están encima de la mesa para el segundo semestre del año, ahora habrá que esperar a que se materialicen, pero ambas posibilidades me las han ofrecido, sólo he de esperar a que las fechas estén más cerca para discutir los detalles. Si por lo que fuere no llegará a materializarse ninguna de ellas, este año yo si daría por hecho que mi retirada es definitivamente de por vida.
DM: ¿Cuál es tu filosofía de vida?
MG: No sé si la tengo. Se que tengo una gran lucha interna intentando ser mejor persona, no cometiendo errores del pasado, tengo una personalidad muy complicada y el intentar mejorarla me ocupa mucho tiempo y energía. Intento ser mejor persona, fuera de eso no creo en estilos, partidos políticos, razas, religiones, ni pertenecer a ningún grupo de sea lo q sea, porque eso sólo sirve para separar a los humanos: divide y vencerás. Creo q eso es lo q hacen con nosotros, dividirnos en grupos para sentir odio o repulsión por todo lo que no pertenece a nuestras creencias. El ser humano como individuo para mi está por encima de cualquier grupo, equipo o religión.
DM: ¿Tienes miedo a algo o a alguien?
MG: Temo al tiempo, se nos echa encima y te hace perder todo: familia, amigos, pelo, músculo, etc… El tiempo es a lo que más temo.
DM: ¿Quiénes fueron tus ídolos?
MG: Bruce Lee fue el primero, Royce, Rickson y Marco Ruas después. Hoy en día no tengo ni creo en ídolos aunque tengo q reconocer que el tenerlos en el pasado me ha ayudado mucho en la vida.
DM: ¿Cómo es tu día a día?
MG: Pues llevo una vida muy sencilla, tanto que parece la de un anciano. Apenas salgo de casa si no es para entrenar o dar clases… o algún seminario. Sólo si es verano salgo algo más a andar en bicicleta, si no paso prácticamente el invierno como un oso en su cueva. Entreno un par de veces por semana, no puedo decir que mucho. Luego doy mis clases privadas y seminarios los fines de semana. Llevo una vida muy sencilla y sin ningún lujo.
DM: Y si tienes que preparar una pelea ¿En qué cambia tu día a día?
MG: Ahí sí que cambia todo. He de cambiar la alimentación, viajar, puedo decir que me siento más vivo así, pero la edad no perdona. Por mi edad, si no tengo luchas intento no entrenar mucho para no desgastar más mi cuerpo y poder exprimirlo más en una preparación para una lucha. Porque con 46 años no puedo estar entrenando a un nivel de competición durante todo el año. Llevo luchando desde los 8 años de edad mi cuerpo está muy desgastado.
DM: ¿Te ves peleando en una competición?
MG: No, ya no me veo ni me apetece entrar en una competición tipo torneo sea de Grappling, MMA o lo que sea.
DM: Ahora con la retransmisión por Tv, las MMA se están poniendo muy de moda. Más de moda cada día ¿Cómo convencerías al padre de un chaval de 16-17 años que se quiere apuntar a tus clases pero el padre no lo ve muy claro?
MG: Bueno, a esto te debo responder que no intentaría convencer a nadie. Principalmente porque yo no instruyo a grupos, salvo en seminarios. Yo sólo doy clases privadas a profesionales, luchadores, instructores, etc… y su precio por hora sería muy elevado para un niño de 16 años que sólo viene a divertirse. No se podría dar esa situación conmigo.
DM: Al ser pionero, lo tuviste muy difícil a todos los niveles: promoción, bolsas, reconocimiento… Hoy día aparentemente han cambiado las cosas ¿Crees que aquí se puede vivir ya de este deporte? ¿Se puede vivir bien? ¿Hay mucha gente que viva de ello?
MG: No, todo lo contrario. El ser el pionero me hacía vivir muy bien y muchas facilidades para todo.
Al ser el único que había todo el mundo debía aprender conmigo pues no había más. Lo mismo con los medios, había pocos luchadores y menos aún que fueran campeones, entonces los medios siempre se centraban en mí. Era todo más fácil. Las bolsas, al ser el único campeón eran elevadas. Mis ganancias por mes entre clases y seminarios pasaban de los 3000/4000€ por mes en los años 90… ¡y eso era mucho dinero en aquellos tiempos!
DM: ¿Qué le recomendarías a alguien que “quiere ser como tú”?
MG: Nunca recomendaría a nadie ser como yo. Puedo ayudar a la gente a ser ellos mismos basándome en mis experiencias. De hecho es lo que hago cuando enseñó. Nunca intento que nadie haga lo que yo hago o luche como yo. De hecho nunca encontrarás a dos alumnos míos que luchen de la misma manera, intento que cada uno encuentre su camino basándome en mis experiencias.
DM: Háblanos de 3 personas que te hayan inspirado para llegar a ser hoy quien eres, de un ídolo. de un maestro, y de un “rival” que te haya obligado a dar lo mejor de ti para superarlo.
MG: Como ídolo Bruce Lee indiscutiblemente. Fue en el que me inspire desde mi niñez a mi adolescencia, Dan Inosanto como Maestro; un hombre que tenía cerca de 60 años cuando lo conocí y hoy con más de 80 sigue enseñando y sobre todo ¡aprendiendo! es difícil mantener ese compromiso y esa motivación para seguir aprendiendo durante todos los días de la vida. Rafael Silva, mi coach y amigo, me inspiró y saco lo mejor que había en mi para mi lucha en Bellator cuando ni yo creía en mí mismo.
Alex Reid ha sido el rival que más me ha empujado a dar lo mejor que aún quedaba de mí mismo, hice con 44 años lo que todos creían que era imposible.
DM: ¿Eres feliz?
MG: No y sí. Considero la felicidad como un “estado mental”, como la noche y el día, todo es cíclico y cuando toca, se es feliz y cuando no, pues a aguantar y apretar los dientes.
DM: ¿Tus próximos objetivos?
MG: Me gustaría realmente que se cerrará mi lucha con Bellator este año y seguir disfrutando cuando puedo enseñar a otros. No pido nada más.
DM: Para terminar, agradecerte tu tiempo, espero que te guste el resultado de la entrevista, y si quieres dar algún mensaje a alguien, o agradecer, este es el momento…
MG: Si, por supuesto darte las gracias Nacho por brindarme este espacio en tu revista. Y dar las gracias a los que día a día están a mi lado, aunque sea en la distancia. Y a todos los que me han ayudado a llegar hasta donde estoy hoy en día, mis amigos, alumnos, familia, esposa… GRACIAS.